
Los Champions / Yomil y El Dany
Encuentro despedidas en casi todas las estrofas de El Dany. Desde el primer tema después del Intro. A lo mejor ni siquiera lo son y me lo parecen por todo el misterio de sus últimas historias en Instagram. Por esos post que aparecieron luego donde jugaba con la muerte. Pero tema tras tema su voz me deja con la sensación de estar viendo un filme por segunda vez, sabiendo el final y buscando mensajes subliminales, cosas más profundas que no noté a la primera.
Mensajes para su esposa: “Prométeme que vas a ser fuerte/ que todo va a ser para siempre/ que en las buenas y en las malas vas a estar ahí”; para sí mismo: “Yo no sé mañana si se acaba el mundo, pero hoy voy a ser yo/ voy a vivir a mi manera, sin decir que no”; para nosotros: “Llorar pa’ qué, que le vaya bien solo/ no te hagas más daño, no sigas amándolo”.
Con estas mediaciones en la cabeza siento Los Champions (Jungl Yomil y El Dany, 2020) como un disco alante, maduro, un ejercicio de unión en ese mundo reguetonero de ego y discordia. Y también lo siento como un disco triste.
En tantos años juntos, Yomil y El Dany alcanzaron tal grado de afinidad que no parecen un dúo, sino una persona que habla por dos. Superaron el esquema tradicional del dúo de reguetón, que tiene roles: un rapero & un melódico. Y rompieron el diseño corriente de las canciones: rapeo-estribillo-rapeo-estribillo. Nunca predices dónde va a terminar uno para que empiece el otro, ni quién va a hacer los coros y quién va a rapear.

La partida de “El más duro”
Raúl Medina Orama20.07.2020Logrado todo esto, su séptima producción discográfica es una prueba de versatilidad: de cómo encajar, entre tantos estilos, el flow de cada uno y el flow que forman juntos. “Lo último que nos faltaba por demostrar y convencer”. Acentúo esto: 28 invitados a lo largo de casi hora y media: 24 temas donde, como aseguran en el Intro, le hacen saber “a toda una isla y a toda una institución que el reguetón cubano merece respeto”.
La selección de featurings es precisa: desde los pioneros Eduardo Mora y Damián The Lion, del grupo Eddy K, hasta Kímiko & Yordy, la última moda del morfa.
Hubiera sido el verdadero tour por la historia del reguetón cubano si no le faltaran sus precursores: Candyman, El Médico, Cubanito 2002.
Sin embargo es hermoso el recorrido: la referencia al rey Elvis Manuel en Brujería; las figuraciones de casi todos los que marcaron épocas: Baby Lores, El Micha, El Chacal, Yakarta, Osmani García, Señorita Dayana; la unión de Damián y Norlam, que fueron parte de Los 4; la participación, de los que ahora marcan la farándula: Diván, Chesco, Lenier, Alex Duvall.
Se nota la ausencia de Chocolate y Lobo King Dowa, los que inventaron el reparto. Y no, no se compensa con El Úniko, ni con El Kamel, ni con Un Titico. Se nota la ausencia de Gente de Zona.
Es admirable cómo Yomil y El Dany se acomodan al estilo lírico del Insurrecto, al socarrón de Kola Loka, al melodioso casi R&B de Yulién Oviedo, al callejero de Harryson. Esa prueba de flow de la que hablaba.
Clases de rima: “Me la paso fumando to’ el weekend/ tengo tres putangas en speaker/ por debajo del agua como Flipper/ me avisas cuando Billboard los califique/ cuando tú ibas yo venía, en esto es contando los tickets”.
Clases de perreo: “Ella le mete al dembow/ rakatán, rakatón/ siempre high, nunca slow”.
Clases de constancia: “Más me odia, más trabajo/ más trabajo, más me escucho/ más me escucho, más ingreso/ andamos cogidos pa’ eso”.
Expedición al fin, el disco pasa por el dembow de toda la vida, morfa, un poco de trap, un poco de kudurazo. Coproducciones de los DJ Unic, Conds, Lucky, J. Cuban, Adriano, Gomeko. De base esa marcha que los distingue, traptón, con DJ Wongk tras las máquinas.
El 19 de agosto, una semana antes del estreno, Yomil anunció que Los Champions había alcanzado el número uno en preventas para el mercado latino, por encima de The Mavericks y La oreja de Van Gogh. “Yo sé que él [El Dany] está muy contento porque esto fue lo que nos propusimos, y gran parte de nuestros sueños con este disco ya están cumplidos”, escribió El Nene en Instagram.
A pocas horas de su lanzamiento, el álbum debutó en el primer puesto de Apple Music. Alcanzó la tercera posición en ventas en España, cuarta en Estados Unidos y séptima en Italia. También, según VISTAR, entró en mercados de Alemania, Suiza y Francia.
En estos días donde está difícil la vida y estoy más tiempo en la calle buscando comida que en cuarentena, me encuentro este disco por todas partes. En las colas, en la wifi, en Internet, en cualquier edificio. La partieron, Dany. Yomil y tú son lo más pegado de toda Cuba. Descansa sabiéndolo.
Excelente descripción los más visionarios Yomil Y El Dany
Me gustaron siempre y este disco esta barbaro, los felicito, Dany DEP dejaste un magnifico trabajo
Excelente comentario sobre el disco, muy exacto. Todavia no entiendo como en un país tan musical lo que más escuchan las personas es lo que menos apoyo tiene de las instituciones culturales. Se dice que si es un género chavacan, que si las letras no dicen nada…, habría que preguntarse por qué entonces gusta tanto, aún después de casi 20 años que el regueton llegó a Cuba se sigue siendo un poco marginado. Mis respetos para todos estos artistas que lo que han logrado en Cuba y a nivel internaciona(con premios, ventas y reconocimiento) ha sido por su propio esfuerzo. Saludos
Jesus, te escribia desde Miami cuando estabas en Granma. Escribeme.